Ávila ha estrenado la primera máquina expendedora de leche.

Se trata de una instalación situada en la Plaza de Santa Ana, en el centro de la ciudad, a cuya inauguración ha asistido el alcalde de la capital, Miguel Ángel García Nieto, quien ha deseado “éxito” a esta iniciativa que ofrece a los consumidores “leche de calidad, no sucedáneos”.

El proyecto iniciado en Arévalo y ahora en Ávila está impulsado por dos hermanos ganaderos de Palacios Rubios, una entidad dependiente del municipio de Nava de Arévalo: José Luis y Herminio Senovilla.

Ambos se plantearon esta posibilidad hace un año y medio durante un viaje a Cantabria, donde comprobaron el resultado de una experiencia de estas características por parte de un compañero que obtuvo buenos resultados, ya que la venta media diaria se situaba en torno a los quinientos litros.